– Proyección retrospectiva de Digital 104: cortometrajes 2006-2009Martes 7 de febrero 2012. 20:30 h. (entradas a la venta)
o “Amanece”, dir. Jairo López (2006). 30 min.
o “OFF”, dir. Domingo. J. González (2006). 22 min.
o “Acto primero”, dir. Jonay García (2007). 17 min.
o “Algo que aprender”, dir. Eugenia Arteaga (2009). 15 min.
o “Insecto”, dir. Digital 104 (2007). 12 min.
– Proyección de “El jardín barroco (work in progess. v. 2)”
Jueves 9 de febrero 2012. 17:00 h.
o “El jardín barroco (work in progess. v. 2)”, dir. Jairo López (2012). 80 min aprox.
Una noche del mes de septiembre del año 2005, en el bar La Jarra de La Laguna, decidíamos dar nombre a un sueño cinematográfico y vital compartido: Digital 104. En mayo de ese año rodamos “Amanece”, corto previo en sí a la fundación del colectivo, pero que de alguna nos sirvió para comprender que hacer cine digital era posible, y que era menos difícil y más divertido hacerlo en grupo. Ahora, ya no sabemos hacerlo de otra manera.
Comenzamos a partir de entonces a escribir y rodar guiones con una ilusión, fuerza y rigor creo que enormes, y con muy pocos medios. Apoyados por numerosos amigos y colaboradores que nos han apoyado y han creído en nosotros, y con los que hemos crecido juntos en esto del audiovisual.
Ahora, después haber hecho otros cortos de formato semiprofesional como “Como siempre” o “Ridícula”, y mientras ultimamos y preparamos nuestros próximos estrenos de “El Círculo” y “Veneno”, recuperamos para esta proyección en el renovado Aguere Espacio Cultural nuestros cortos de la primera etapa. Los que asistieron a alguno de esos estrenos en el Víctor podrán volver a ver lo que hicimos en pantalla grande a la luz de nuestra evolución posterior, y, para los que nunca los han visto, pues les ofrecemos la posibilidad de descubrir nuestros orígenes como cineastas en colectivo, ya que cada uno de nosotros venía haciendo cosas desde principios de los 2000. Podrán sufrir con el dolor cotidiano de “Amanece”, con el agobio de “OFF” o con la frustración de los protagonistas de “Acto primero” y “Algo que aprender”, atrapados en miedos interiores, creo que como todos… Podrán también, confío, espero, emocionarse con algunos momentos, sorprenderse de algunos finales o simplemente reírse de nuestras torpezas, de nuestra manera de contar aquellas historias. O descubrir que un poema tiene tantas lecturas como lectores.

Jairo López





